A mediados de julio de 2021, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha registrado más de 187 millones de casos de COVID - 19, incluyendo más de 4 millones de muertes, en todo el mundo.
Los mismos datos muestran que las autoridades sanitarias han administrado hasta ahora más de 3.000 millones de COVID - 19 dosis de vacunas. Estas vacunas se han asignado en gran medida sobre la base de la susceptibilidad de las personas a contraer el virus y el riesgo de enfermedad grave.
Varios estudios han demostrado que los desenlaces adversos de COVID - 19 están relacionados con condiciones de salud subyacentes, incluyendo enfermedades cardiovasculares, enfermedades renales, obesidad, diabetes y enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).
Otros estudios han encontrado que los factores socioeconómicos, como la raza y el origen étnico y los ingresos influyen en COVID - 19 números de casos.
Se prevé que las vacunas para COVID - 19 serán escasas en un futuro próximo. Encontrar mejores maneras de asignarlos podría reducir los resultados adversos del virus de manera más eficaz.
Científicos de la Universidad de Columbia, en Nueva York, llevaron a cabo recientemente un estudio para entender si la asignación de COVID - 19 vacunas de acuerdo con factores de salud y socioeconómicos podría reducir el número de muertes por la enfermedad.
Encontraron que los factores socioeconómicos y de salud pueden explicar diferentes tasas de mortalidad de COVID - 19 en todos los condados de los EE.UU. y que la asignación de vacunas de acuerdo con estos factores podría mejorar la distribución de vacunas.
Los hallazgos fueron publicados en PLOS Medicine.